jueves, 5 de noviembre de 2009

Los primeros músicos de jazz-2ªparte















Thelonius Monk

• Nacido en Carolina del Norte en 1917, Monk se formó en Nueva York, desde lo que años mas tarde se conocería como bebop. Su primera aparición registrada fue con Charlie Christian en una actuación en el Minton´s Playhouse, la cuna del beboop. Tocó el piano en la primera big band de Dizzy Gillespie en 1945, y su composición mas conocida “Round Midnight” se convirtió en un ícono jazzístico de los años cuarenta.



• Se puede describir a Thelonius Monk como al gran genio excéntrico cuyas extravagancias y caprichos no eran mas que puro exhibicionismo. Una de las mentes mas agudas del jazz cuando se analiza su trabajo como pianista y compositor.



• De todos modos Monk se mantuvo siempre demasiado absorbido en su propia creación como para poder ser clasificado dentro de una determinada escuela.

• Mientras la rapidez de ejecución fue siempre un rasgo distintivo de los intérpretes del beboop, Monk tenía otras prioridades. Si lo juzgamos bajo los parámetros de precisión y regularidad, su manera de tocar podría describirse como negligente. Sin embargo, Monk lo forjó a partir de un método que desplegaba acentos rítmicos e improvisaba sobre el material de una manera absorbente, y que tubo un profundo impacto en muchos de los que le escucharon, entre otros Sonny Rollins.



• Hacia 1960, era ya poseedor de todas aquellas cualidades que le situaron entre los grandes. A parir de entonces disfrutó con hacerse descubrir por las grandes audiencias. Hacia finales de la década, su influencia era ya mundialmente reconocida. Ocasionalmente aparecía liderando formaciones más numerosas que sus habituales cuartetos.



• En las giras solía ir en formación de un cuarteto, normalmente con Charlie Rouse como saxofonista. Todas las melodías eran de Monk, salvo un puñado de baladas que le gustaba tocar. una de las cuales era “ I’m Getting Sentimental Over You” .


• Monk no tenía reputación como orquestador, y no era un compositor prolífico. Su repertorio, entre sesenta y setenta composiciones, no es de los mas extensos. Se distinguió, sobre todo, por sus fácilmente asimilables melodías cuya despojada sencillez ofrecía ilimitadas posibilidades al improvisador. “I Mean You”, “Evidence”, y las espléndidas baladas “Ruby My Dear” y “Crepuscule With Nellie” son solo algunos ejemplos que lo demuestran.






















Ornette Coleman


• Coleman nació en Fort Worth, Texas, en 1930. Pasó los últimos anos de su adolescencia tocando en bandas principalmente el saxo tenor. Se interesó en el bebop a través del influjo de Red Connors, un saxo tenor que gozaba de gran reputación local. A principios de los cincuenta se desplazó a Los Ángeles, donde sus originales ideas acerca de la música atrajeron pocos seguidores, consiguiendo que le echaran de varios grupos.


• Quizá el visionario más genuino de todos, el impacto de Ornette Coleman sobre el jazz está hoy tan vivo como cuándo se produjo por primera vez. Su influencia se manifiesta no tanto por sus emuladores (nunca tuvo demasiados discípulos) cuanto por el modo en que sus ideas se filtraron en el sistema, a menudo mucho más tarde de que hubieran sido formuladas.



• En 1958, Coleman, hizo sus primeras grabaciones con el saxo alto junto a Cherry, Haden y Higgins,. Pasó bastante tiempo antes de que estas cintas fueran distribuidas, aunque en ese mismo año Coleman grabó dos álbumes para Contemporary, por primera vez como líder. Se llevó luego al grupo de Hillcrest, al Five Spot de Nueva York, donde protagonizó una de las actuaciones más controvertidas de la historia del jazz. A diferencia de lo que habla ocurrido con el dúo Parker/Gillespie en el Billy Berg de Los Ángeles, esta actuación se llevó a cabo con la máxima promoción publicitaria, consiguiendo provocar gran revuelo en los ambientes musicales.



• Sus señas de identidad ya están ahí. La improvisación, bajo un impulso rítmico continuo, no se fundamentaba ni en los acordes ni se formaba directamente sobre la estructura de la melodía. Había melodías desgarradoras, otras que asemejaban cantos fúnebres y piezas más melódicas con vuelcos y acentos curiosos. Su música exudaba a menudo una calidez más próxima al blues más rural que a su sucedáneo más urbano.

• Coleman añadió pronto breves pero frenéticos interludios de trompeta y violín, impartiendo nuevos colores que conducirían directamente a los furores del free jazz de los años venideros. Su propio Free Jazz, grabado con un cuarteto doble, inspiró obras tan dispares como “Ascensión” de Coltrane .



• Coleman no alteró sensiblemente su música hasta principios de los setenta, cuando formó Prime Time. El estilo de este grupo derivó, en parte, tras su experiencia de grabar con músicos de Joujouka en Marruecos. Asimismo, era también una expresión práctica de su teoría de la fusión de armonía, movimiento y melodía, en la que los instrumentos renuncian a sus roles armónicos o de acompañamiento para aportar, en su lugar, melodía y ritmo a partes iguales. Habitualmente, escogía dos guitarras y dos bajos eléctricos y dos baterías (uno de ellos su hijo Denardo) para entrelazarse con su saxo, y encontró de nuevo una respuesta ambigua entre críticos y audiencia.

























Benny Goodman


• Un prodigio nacido en 1909, Goodman estudió clarinete con Franz Schoepp, A principios de los veinte, Goodman tocaba con el frenesí y la tosquedad propias de otros clarinetistas locales. Pero a mediados de los treinta, evolucionó ya hacia su estilo de madurez, enormemente influyente, mucho más suave y con un sentido del swing muy refrescante.



• Trabajó con Ben Pollack y Red Nichols. También consiguió un programa radiofónico en el que tocaba en directo una hora semanal. El influyente mecenas del jazz John Hammond, que luego se convertiría en el cuñado de Goodman, le aconsejó contratar a Fletcher Henderson como arreglista. Rompiendo la barrera racial impuesta en el jazz desde el exterior, contrató también a Teddy Wilson, Lionel Hampton y, posteriormente, a Charlle Christian y Cootie Williams.



• En la década de los cuarenta, su banda continuó evolucionando, empleando los arreglos de Eddie Sauter y Mel Powell que eran más sofisticados que los propios de la era del swing. Tras un breve flirteo con el bebop, estilo que no le apasionaba especialmente, retornó a su estética original.



• La hora de Goodman en la vanguardia había ya pasado. Sin embargo, se mantuvo como un músico excepcional hasta el fin. En 1962, el Departamento de Estado le mandó a Rusia al frente de una big band. Fue uno de los primeros americanos en interpretar su música en Europa encabezando una banda integrada básicamente por músicos británicos.



• A pesar de los enfrentamientos entre blancos y negros que a menudo se cuecen en el mundo del jazz, la posición de Goodman como Rey del Swing indiscutible no levantó nunca ampollas. No cabe duda de que él no inventó la música, ni tampoco se arrogó dicho titulo, pero introdujo la música de las grandes big bands en los hogares americanos. Aunque la comparación estricta de las melodías de Goodman con las grabaciones de Fletcher Henderson en 1934 favorecería seguramente a este último (la suya fue una banda espectacular, aunque de corta duración), se podría aventurar que si comparáramos globalmente las actuaciones de uno y otro obtendríamos resultados distintos.



• Sea como fuere, siempre puso el listón muy alto, a la vez que su estilo al clarinete fue insuperable. El swing fue la expresión más afín a su personalidad. Como clasicista innato, no se le puede imaginar articulando minuciosamente una buena melodía a la manera de Artie Show. Raramente ostentoso en la expresión de su técnica, los mejores solos de Goodman se envuelven de gracia, buen gusto y un tempo perfecto.






















Charlie Parker

• Parker nació en Kansas City, Misouri, en 1920.Su talento natural con el saxo alto se vio reforzado por la práctica frenética del ragtime. Trabajó con varias bandas locales, a destacar la orquesta de Jay McShann, donde tuvo sus primeras oportunidades de grabar. También de eso época viene el apodo de “Yarbird” o “Bird”.



• La leyendas tiende a multiplicarse, sobre todo en el caso de aquellos músicos de Jazz cuyas vidas fueron cortas y temerarias. Charlie Parker fue algo más que el titán del bebop. Símbolo del desafío, fue el hedonista negro que osó mofarse de la sociedad blanca. Aun precipitando su caída no se rindió jamás. De entre las grandes figuras, Parker probablemente en mayor medida que Billie Holiday, acabó siendo la cabeza de turco del sistema.



• Su asociación con Dizzy Gillespie en 1945 introdujo este estilo en los clubs de Nueva York.Tras una desafortunada estancia en Loa Ángeles que terminó en el hospital, regresó a Nueva York y formó el más afamado de sus quintetos. Miles Davis y Max Roach eran piezas clave en él, Tommy Potter tocaba el contrabajo y Duke Jordan . Parker sólo abandonó el formato de quinteto y cuarteto durante un breve período de tiempo en el que estuvo de gira al frente de una reducida sección de cuerda.



• Incluso hoy día, el jazz es una música de carácter marcadamente rítmico. Parker introdujo en ella un lenguaje rítmico aún más complejo. A medida que se tomaba mayores libertades con el compás el swing parecía acrecentarse. Mientras la intensidad rítmica de sus agitadas líneas melódicas ascendía como un torbellino, su sabor emocional procedía directamente del blues de Kansas City en el que se había formado (y que la banda de McShann interpretaba con gran solidez).



• En los inicios de su carrera su había convertido en heroinómano. Con un consumo regular, los adictos pueden funcionar normalmente y él no fue una excepción. Lamentablemente, vivía en un sistema donde forzosamente debía acudir al mercado negro cuyo abasto y calidad es siempre irregular. Su adicción al alcohol -que sustituía a la heroína cuando no la podía conseguir- le llevó a una vida cada vez más caótica y disoluta.



• En 1951, las autoridades de Nueva York le retiraron la licencia para tocar en los clubes por recomendación del departamento de narcóticos, que nunca había conseguido arrestarlo. Como consecuencia de ello, se vio obligado a buscarse la vida deambulando por el país para trabajar en secciones de ritmo locales. Esto sucedió en un momento en el que los problemas de salud de su hija le sumieron en una constante y vigente necesidad de dinero para pagar las facturas médicas. El sentimiento de culpabilidad que le produjo su muerte dos años después acabó de arrasarle. Cuando murió a los 34 años, el médico forense estimó su edad en 60.



• Para evaluar brevemente el genio de Parker podemos permitirnos considerar estrictamente las melodías e ignorar sus muchos solos soberbios. Los mejores temas que incluyen “Moose The Mooch”, “Confirmation”, “Cheryl” y la mayor parte de sus blues resumen una obra fuera del canon de la música occidental e incluso del propio jazz.

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